En el local donde arrancó el primer Zaranda de Fernando Pérez Arellano se encuentra este pequeño y coqueto restaurante regentado por Saúl Sanz. Sólo dos años han bastado para que esta apuesta por una cocina de mercado, honesta y sabrosa, se haya hecho un hueco en el panorama gastronómico capitalino.
Discípulo de César Martín (Lakasa) en el tristemente desaparecido Balzac, Saúl maneja como su maestro la caza con muy buena mano. No obstante en temporada ofrece un interesantísimo menú degustación únicamente a base de caza más que recomendable. Y es que es precisamente la temporada la que marca la carta de Treze, que cambia con cada estación.
La carta de vinos no es excesivamente larga pero cuenta con referencias interesantes y precios bastante contenidos en términos generales. Merece la pena echar un vistazo detenidamente porque se pueden encontrar cosas muy recomendables.
SARDINA CON HUMMUS. Excelente aperitivo. Sardina prácticamente cruda acompañada de un hummus con un toque cítrico que contrastaba a la perfección con la grasa del pescado.
CROQUETAS DE JAMÓN IBÉRICO Y DE FAISÁN Y BOLETUS. Buenas croquetas, cremosas, potentes de sabor y con un rebozado nada basto.
TERRINA DE FOIE HECHA EN CASA CON PAN DE NARANJA Y ANÍS Y CONFITURA DE KUMQUATS. Hígado de calidad, tratado lo justo, con un buen sabor y textura y servido sin alharacas innecesarias que enmascaren el producto principal.
BACALAO CON MIGAS MARINAS, CHIPIRONES Y ALIOLI. Generosa ración de un bacalao en su punto, con los lomos tornasolados y servido con unas migas marinas absolutamente gulescas.
PICHÓN ASADO SOBRE ARROZ DE SETAS Y PATÉ DE PICHÓN. Ave perfecta de punto, con su pechuga apenas cocinada y unos muslitos crujientes. El arroz, en este caso, estuvo un pelín por debajo del ingrediente principal.
POSTRE RECUERDO DE VERANO. Divertido trampantojo en el que el helado esconde una tarta Ópera bañada con una cobertura de chocolate blanco y almendras teñida de rosa.
Una muy buena comida, sin altibajos, que demuestra una cocina sólida y sin artificios innecesarios. Saúl es un gran cocinero, con las ideas muy claras, y eso se plasma en cada uno de sus platos.
Sin duda, uno de esos sitios a los que apetece volver.
TREZE
Calle de San Bernardino, 13
28015 Madrid
Telf: +34 915 41 07 17